No es la situación ideal. De eso estamos convencidos. Sin embargo, las piezas para coche, bien sea por el paso del tiempo o bien sea por su uso, terminan por deteriorarse. Sin embargo, hay varios estudios que aseguran que hay algunas piezas que se rompen con mayor frecuencia que otras por lo que nos ha parecido que puede ser interesante saber cuáles son estas piezas de manera que podamos estar prevenidos para cualquier tipo de eventualidad y sepamos cuáles son los puntos clave de nuestro coche para cuidarlo.
La primera pieza a la que tenemos que hacer referencia es el tubo de escape. Cierto es, esto es algo que no podemos negar bajo ningún concepto, que cada vez son más resistentes los tubos de escape. Sin embargo, todavía a día de hoy sigue siendo una pieza que se rompe bastante debido a las altas temperaturas que soporta y debido al mismo tiempo a los posibles impactos que puede recibir.
Otra de las piezas que más sufre, aunque más que una pieza en concreto deberíamos hablar de algo mayor, es el espejo retrovisor. Un espejo retrovisor que, como te puedes imaginar, nos referimos al exterior ya que el interior tiene muy pocas probabilidades de romperse salvo por causas extraordinarias. El problema con estos espejos es que cuando queremos adquirirlos casi siempre tendremos que acudir al fabricante original, para que sean exactamente iguales, con todo lo que supone desde el punto de vista del precio del mismo.
Seguramente en algún momento has escuchado hablar de los manguitos. Y decimos que has escuchado hablar de los maguitos porque seguramente se te hayan roto en alguna ocasión. Pues bien, hay que decir que son muchas las personas las que al menos una vez en su vida como conductor sufre una rotura de este tipo. Esta pieza es muy sensible a las temperaturas y hay que cuidarla mucho si no queremos que el coche nos deje tirados en el peor momento posible.
Para terminar, si bien hemos dicho que algunas piezas merece más la pena adquirirlas directamente en el fabricante, hay que decir que otras tantas merece más la pena adquirirla en un desguace. Al menos desde nuestro punto de vista puede compensar pedir un presupuesto sobre la pieza en cuestión ya que si tenemos suerte obtendremos un gran ahorro. Y todo ello con la ventaja de que esas piezas tienen garantía por lo que su calidad y su buen funcionamiento no da lugar a la duda.