Ser mamá es la mayor felicidad que puede experimentar una mujer. El embarazo, parto y lactancia son experiencias únicas que vivimos intensamente, aunque también tienen consecuencias negativas para nuestro cuerpo. Una de ellas son las estrías, la mayor enemiga de las embarazadas.
Durante y después de este periodo, la piel se estira enormemente debido al volumen, rompiendo las fibras elásticas epidérmicas y dando lugar a líneas finas e irregulares que marcan nuestra piel en determinadas zonas del cuerpo, como senos, barriga, glúteos y piernas.
Las estrías aparecen por falta de elasticidad, poca hidratación y descontrol del peso o las hormonas durante la pubertad o embarazo. Sin embargo, se pueden evitar con constancia y dedicación.
Estos son algunos consejos:
#1. Hidrata la piel entre dos y tres veces al día. Márcate una rutina de hidratación con antiestrías para embarazadas, aplicándote bien en los senos, barriga, glúteos y piernas. Marcas como SUAVINEX o ISDIN disponen de cremas especialmente elaboradas para su uso durante el embarazo y postembarazo.
#2. Bebe mucha agua. En los adultos, se recomienda consumir al menos 2 litros de agua al día. La mejor opción es tener siempre a mano una botellita y dar pequeños sorbos de forma continua.
#3. Camina. Sal a andar una hora al día y tú misma verás como mejora tu estado. Caminar es muy sano, te ayudará a mantenerte en forma y evitarás problemas de circulación sanguínea.
#4. Reduce la exposición directa al sol. Tomar el sol tiene beneficios para la piel, pero está demostrado abusar o hacerlo sin protección solar, afecta negativamente a la piel y su envejecimiento. Las estrías tienen más posibilidades de aparecer si tomamos el sol sin una crema adecuada a los rayos ultravioleta o de forma continuada.
#5. Alimentación saludable. Toma a diario una buena ración de verduras y frutas de todos los colores, así como una porción de carne o pescado, tanto en la comida como en la cena. Es importante aportar vitaminas A, E, C y magnesio durante el embarazo para mejorar la piel.
#6. Evita la ropa excesivamente ajustada. A medida que ganes volumen, necesitarás prendas más cómodas y que no opriman.
#7. Masajes. Los masajes circulares ayudan a drenar para evitar el efecto de piel de naranja, mejorar la circulación y fortalecer la epidermis. Todo ello, hace que mejore notablemente la elasticidad y la piel no se rompa con facilidad.
Al final, evitar las estrías en el embarazo es cuestión de aplicar hábitos saludables. ¡Empieza desde ya!